Las siete lecciones que aprendimos con The Bold Type

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Ayer llegó a su fin una se las series que ha cobrado mucha relevancia en fechas recientes y por ello te queremos contar de las siete lecciones que aprendimos tras ver The Bold Type. Protagonizada por Katie Stevens, Meghann Fahy y Aisha Dee, durante cinco temporadas esta historia nos ha llevado por varias historias sobre el feminismo, la amistad y el autodescubrimiento.

Lo que sí es que entre las siete lecciones que aprendimos de The Bold Type, no están los cuatro galanes de los que ya les habíamos hablado. Pero en parte sí influyen porque a través de sus historias románticas, las tres protagonistas nos enseñaron valiosas lecciones. Así que digamos adiós a Jane, Sutton y Kat como se lo merecen.

SORORIDAD

La sororidad se describe como a la solidaridad entre mujeres, especialmente ante situaciones de discriminación sexual y actitudes y comportamientos machistas. Y estas tres amigas estuvieron siempre la una para las otras. Desde el día uno fueron cómplices para lo bueno, lo malo y lo feo. La doble mastectomía de Jane, la crisis de alcohol y romántica de Sutton, la crisis de identidad de Kat.

También estuvieron cuando Jane y Kat perdieron su trabajo en Scarlet y cuando Sutton quería convertirse en estilista y dejar de ser asistente. Nunca juzgaron a las parejas de cada una, aunque tal vez se morían por hacerlo. Y lo más importante, no se juzgaban entre ellas.

LOVE IS LOVE

Gracias a Kat, entendimos que no importa la orientación sexual. El amor es simplemente amor y no tendría porqué tener etiquetas. Cuando conocimos a este personaje, ella salía con chicos y sólo eran amoríos de una noche. Pero todo cambió cuando conoció a Adena El Amin (Nikohl Boosheri). Con ella se atrevió a amar y a pensar en lo que sería una relación de verdad. Sin embargo han tenido muchos altibajos. Lo curioso del asunto es que Kat comprendió que ella no se enamoraba de un género, sino de las personas. Incluso tuvo un pequeño affair con un cantinero. Después intentó con otras chicas.

UN GRAN MENTOR SIEMPRE SERÁ DE AYUDA

Díganme si no es así. Cuando comenzamos nuestras carreras profesionales, el tener a un mentor que esté ahí no para gritarte, sino para apoyarte y ayudarte a destacar tus talentos, es súper importante. Y éste fue el caso de Jacqueline Carlyle, quien fue interpretada por la guapísima Melora Hardin. Ella tuvo el ojo de descubrir el potencial de Kat y Jane como alguien dedicada a las redes sociales y como una gran periodista, respectivamente. Ella les enseñó que a pesar de la adversidad o de las pruebas que tuvieran a nivel personal, siempre podían ser profesionales. Si recuerdan, cuando Jane decidió cambiar de trabajo y luego la despidieron, ella no la recontrató de inmediato, aunque se moría por hacerlo. Jacqueline siempre quiso que Jane encontrara su camino y esa experiencia la ayudó mucho.

Por otro lado, Oliver ayudó a Sutton no sólo a que se diera cuenta de sus sentimientos por Richard, sino que la ayudó a convertirse en una profesional. Ambos hicieron algo que en pocos lados se da: un equipo. Confiaban el uno en la otra y viceversa y siempre se cubrían las espaldas y lo mejor es que Oliver siempre creyó en Sutton y en su talento. Además, no humillaba si Sutton cometía un error. Al contrario, siempre la impulsó.

PODEMOS DECIR «NO»

Si hay algo tremendo que nos enseñó en particular Sutton Brady (Meghann Fahy) es que podemos decir no, incluso al amor de nuestra vida. Ella se atrevió a hacer lo que muchas deciden u optan por hacer y fue decir no a tener un hijo. Ella pensó que sí quería tener una familia y ser madre. Por ello se casó, pero luego de un aborto espontáneo, Sutton decidió que lo mejor para ella no era la maternidad. Eso provocó su ¿divorcio? de Richard (Sam Page). Para unos podría ser una postura egoísta, para otros, una válida. Cada quien tiene su opinión al respecto.

A GOZAR DE NUESTRA SEXUALIDAD

Estas tres amigas no tenían complejo alguno. Las tres vivían según sus convicciones. En el caso de Jane, fue hasta gracioso cómo plantearon su falta de orgasmos. Sin embargo, no fue gracioso el camino que tomó para mejorar su vida sexual. Ir con una sexóloga, ver porno, y un sin fin de opciones fueron exploradas. Además, al compartir departamento con Sutton, las ayudó a hablar de todo sin tapujos, ¡hasta por accidente compartieron vibrador! Kat también nos mostró que encontrar el vibrador es importante. Y lo mejor de todo, las tres no temían discutir con su pareja lo que era mejor para ellas y ellos en la intimidad.

HACERLE CASO A LA INTUICIÓN

En muchos lados hemos escuchado hablar de la «intuición femenina» y la verdad es que sí existe y debemos aprender a hacerle caso. ¿Recuerdan que tras el viaje de Pimpstripe para promocionar su libro Jane no confiaba en él, aunque el propio Ryan le confesó su infidelidad que consistió en solo un beso? Pues bien, aunque ella intentó seguir su relación con «normalidad» e incluso lo consiguió durante un tiempo, lo cierto es que nunca dejó de tener esa duda. Y así, aunque era la pareja favorita de muchos, la relación se terminó. Pero…

A AMAR NUESTROS CUERPOS

Jane Sloan tenía miedo de contraer cáncer y por ello decidió hacerse una doble mastectomía. Con todo el dolor de su corazón, por decirle adiós a sus senos naturales, Jane nos hizo darnos cuenta que cada parte de nuestro cuerpo es hermosa. Ella tardó mucho en acostumbrarse a tener partes de silicón dentro de ella misma. Pero lo que para muchos podría ser una mutilación de su cuerpo, para otros se trató de un profundo amor por su cuerpo y por su vida. ¿Una decisión por miedo? Tal vez, pero consciente e informada.

Y es que desde que llegó a Netflix, supimos que ésta es una serie que debías ver. ¿Están de acuerdo con estas siete lecciones que aprendimos de The Bold Type? ¿Nos faltó alguna?