Sabemos que desde hace unas semanas, Kanye está teniendo un episodio bipolar. Esta vez, Kanye West volvió a Twitter para lanzar ataques contra las disqueras Universal y Sony, exigiendo la cancelación de su contrato porque dice que no son justos.
De hecho, el esposo de Kim Kardashian se aventó la puntada de subir un video en donde tiene un Grammy en la taza del baño y lo está orinando para demostrar que está totalmente en contra de la industria musical, por lo cual no ha lanzado nuevos temas y se niega a hacerlo.
«Universal no me dirá lo que cuestan mis grabaciones porque saben que puedo permitírmelas»
Kanye West en Twitter
El rapero, que en días anteriores pidió terminar su contrato con los sellos de Sony y Universal, asegura que hará “todo en su poder legal” y usará “su voz para que cambien todos los contratos de artistas comenzando por obtener sus grabaciones para sus hijos”, ya que afirma, la industria musical abusa de él y de otros artistas.
Incluso, en su lucha Kanye West también ha apelado a otros artistas en Twitter para que difundieran sus mensajes en contra de las disqueras. Bono -vocalista de U2-, “Paul” -presumiblemente el ex-Beatle Paul McCartney-, Drake, Kendrick Lamar e “incluso Taylor” Swift -con quien mantiene una pública enemistad-, han sido llamados por el rapero para que lo «auxilien» en su lucha.
Precedidos de una serie de citas bíblicas y referencias religiosas, Kany West también publicó en Twitter, los contratos que ha contraído con las disqueras y que ha firmado a lo largo de los años, página a página. Con este movimiento, Kanye aseguró en Twitter que todos los músicos serán libres.
Kanye West pide ayuda en Twitter a otros músicos
Además de su lucha en Twitter contra las disqueras, Taylor Swift, y hasta su esposa, Kanye también sigue peleando por hacerse de un espacio como candidato a presidente de Estados Unidos.
Recordemos que este episodio bipolar es uno de los que el artista ha sufrido a lo largo de los años. Incluso, hace unas semanas Kim Kardashian pidió empatía para con su esposo, luego de los alarmantes tuits que publicó y que fueron los primeros indicadores de un nuevo brote psicótico.