Una vez que Harry terminó con sus compromisos reales este lunes, ni tardo ni perezoso se trasladó a Vancouver, para reunirse con Meghan y Archie, quienes ya están disfrutando de su vida como civiles en la isla canadiense.
De hecho a Meghan se le captó ayer paseando al niño y a sus perros en un bosque cercano a su nuevo hogar acompañada por dos elementos de seguridad, que estuvieron atentos a sus movimientos en todo momento.
A Harry se le vio llegando al aeropuerto después de aparecer en la cumbre de inversión Reino Unido-África, celebrada el lunes en Londres, donde se reunió con varios jefes de estado africanos y mantuvo un encuentro privado con el primer ministro, Boris Johnson.
Harry, Meghan y Archie vivirán en la Isla de Vancouver, la cual es considerada como «el jardín trasero» de Canadá y debido a su naturaleza, vida silvestre y tranquilidad, es uno de los lugares turísticos más visitados del país.
Esperemos que la vida de los Sussex sea todo lo que esperan, pero al menos por ahora, tranquilidad es lo que menos tendrán debido a la presencia de paparazzis.
Las fotos hicieron enojar a Meghan
De hecho, hay nueva información, pues al parecer Meghan está tan enojada por las fotos de su caminata, que según TMZ demandarán a los medios que compren o distribuyan dichas fotos.
En Reino Unido, hay una ley que establece que los «royals» pueden demandar a los medios si publican fotos suyas cuando no están en actos públicos, pero en Canadá la verdad es que ni al caso esa ley.
Pero al parecer, los Sussex están dispuestos a todo con tal de preservar su intimidad, ¡a ver cómo les va!